no hay vías, sólo agua, salada por la sal y por el sudor, por la niebla, entre las vías del ser, en las profundidades del cielo azul, surcado por las alas desplegadas a ambos lados del alma pura, limpia de corazón y pensamiento, navegando rumbo...
Bola roja, camino blanco y sinuoso, rodando y rodando, deslizándose por el terciopelo, acariciando los bordes hasta el éxtasis ecuatorial, continuando el itinerario sin marcar, desplazándose con elegancia y saber estar, para disfrutar de los acontecimientos que nos van abordando, o nosotros a ellos ...
... con sardinas frescas de la ría ...de hoguera en hoguera, hipnotizado por el crepitar, saltando por encima de las llamas mágicas, purificadoras.Fiesta, música, sabores, olores, colores de verano en el solsticio del fuego ...Xaime Cortizo Fotografía, Diseño y Comunicación Web...